Bartomeu se baja los pantalones con Qatar: firma por una tercera parte de lo que pedía

Josep María Bartomeu ha tenido que aceptar un oferta que le deja en muy mal lugar. La necesidad económica del Barcelona le ha obligado a bajarse los pantalones con Qatar Sports Investment tras recibir un revés judicial con los terrenos de Can Rigalt. La Junta Directiva del club firmará por una cantidad próxima a los 35 millones de euros por una única temporada más de patrocinio con el Emirato.

El Barcelona ha firmado este acuerdo de patrocinio tras verse arrinconado por un laudo arbitral que le ha obligado a recomprar a la empresa Llave de Oro unos terrenos que vendió en 2005 por 34 millones de euros y que ahora, con intereses de por medio, le obligarán a desembolsar 47 millones que no tiene.

Qatar Sports Investment ha renovado prácticamente por la mitad del precio que tenía acordado con el ex vicepresidente Javier Faus a principios de 2015: 60 millones al año. Bartomeu se subió a la parra después de los éxitos deportivos de aquel año –cinco títulos– aumentando el precio hasta los 100 millones incluyendo el nombre del Camp Nou. Aquel movimiento enfadó a los árabes hasta tal punto que las conversaciones se rompieron por completo a finales del año pasado. Los representantes del Barcelona no eran ni recibidos en Qatar.

El Barça intentó acercar posturas a finales de temporada anunciando un amistoso que sus propios jugadores boicotearon en Qatar. Esa espinita también está vigente en el contrato por un año que acaban de suscribir ambas entidades. Si el Barça no quiere ver reducidos los 35 millones de euros prometidos tendrá que acudir al Emirato con todos sus cracks a lo largo de esta temporada. No hay lugar para dar esquinazo.

Bartomeu, que estaba en disposición de ir sin patrocinador esta temporada por amor propio, ha firmado con Qatar ahogado por este nuevo desembolso imprevisto en Can Rigalt y ante la opción de ver comprometidas aún más las opciones de obtener refuerzos para el equipo. Tras los escandalosos acuerdos con la Fiscalía –reconociendo al Barça como una entidad delictiva– lo último que quiere el presidente es someterse a una cuestión de confianza por culpa del artículo 67 de los Estatutos, que hace referencia a mantener un ratio de deuda neta / EBITDA por debajo del 2,0. Si Bartomeu y los suyos se pasan, los ahora enfadados socios tendrán que mostrar si le apoyan o no.

El club, mientras tanto, intenta desviar el foco filtrando un acuerdo con la multinacional Amazon, que instalará una base importante en Barcelona en las próxima fechas. Sin embargo, según ha podido saber OKDIARIO, la compañía online no tiene previsto desembolsar más de 30 millones anuales por la camiseta. A día de hoy esa es la oferta.